sábado, 14 de marzo de 2015

Las cosas sólo dejan de existir cuando se deja de creer en ellas.

Lo que me asombra es no haber abandonado por completo mis esperanzas, que parecen absurdas e irrealizables.Pero sin embargo, me aferro a ellas a pesar de todo y sigo creyendo en la inmensa bondad del ser humano.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

A veces pasa...

...que te reservas la mejor ropa, el mejor perfume, la mejor sonrisa y estado de ánimo...
...que buscas la perfección dentro de lo imperfecto, algo desaliñada, simple...
...que él te vea bonita y se muera de ganas por olerte, abrazarte, sentirte cerca, besarte y que no pueda dejar de mirarte...
A veces pasa que llega esa persona con la que sientes que no te apetece demasiado todo eso, arreglarte o echarte esa colonia que tanto le gusta si no te verá ese día, por ejemplo.


lunes, 8 de septiembre de 2014

Un problema del montón, como tantos otros no?

No voy a decir que hoy es uno de esos días en los que tienes ganas de llorar, porque ultimamente lo son casi todos.
Yo se que todos hemos pasado por lesiones, pero si para muchas otras cosas "yo no soy todos, yo soy yo" para esta tambien.
Solo sé que el tiempo corre, y que yo sigo aqui parada. Y cada día lo siento más así aunque mis ganas de querer sentirlo de otra manera sean enormes.
La gente avanza y yo sigo aqui, parada.
Tambien sé que hay que mirarlo todo de otra manera y que hay gente peor. Pero yo necesito estar bien para no caer en ese "peor" en muchos sentidos. Y ahora digamos que no lo estoy y que mis lesiones no ayudan.
Se que debo ayudar a mi cuerpo a recuperarse para darlo todo de mi con el tiempo, pero como evitar estos días malos?
Quise intentar hacer las cosas bien e intentar darlo todo de mi, una meta en mente y de momento me estampo. Y me quedo ahi. Y sigo ahi hasta el momento.

Sigo teniendo esa meta, pero no se de que manera verla, no se de que manera conseguirla. No veo nada ahora.

Los días, los ratos, que paso sola conmigo misma, sin distracciones, a veces son los peores. Hacia mucho tiempo que no me sentia así. Y esperaba no volver a sentirme así nunca más, pero ya ves, a esta sensacion le he gustado.

A veces ese ánimo repentino que me doi ayuda a olvidar todo lo que me perjudica. Ayuda a tener esas ganas locas de enfrentarme a ello y demostrarme que podre con todo. Pero como evitar estos días, estos ratos en los que se te vienen los sueños y las metas abajo?

lunes, 25 de agosto de 2014

Nadie dijo que fuese fácil

Levante la cabeza pretendiendo mirar hacia adelante como cada día.
La giré a un lado, a otro, pero todo estaba igual. Eso era exactamente lo que siempre temí. ¿Igual? No, yo no quería que todo estuviese igual.
Dar el mismo paso un día tras otro. La misma huella. El mismo zapato. No, yo no quería eso. Quería otra ilusión, otra esperanza, otro amor, otros pasos, otra tierra donde pisar, otros zapatos. Quería seguir viendo el avance en mí. Ver de que soy capaz. Hasta donde puedo llegar y hasta donde puedo seguir llegando después de ello.

Levante la cabeza pretendiendo mirar hacia adelante como cada día y no vi nada. El muro rodeaba hasta donde alcanzaba la vista, grueso, oscuro, de alarmantes grietas húmedas y piedras puntiagudas.
Mientras contemplaba como las fuerzas se iban debilitando, como mis huellas se iban borrando, los zapatos se desgastaban y como todo a mi alrededor se inundaba, decidí buscar, irresponsable de mis actos e impulsos, por toda la habitación con la esperanza de ver unos zapatos nuevos. Con la ilusión de marcar otra huellas. De dibujar otro camino mientras ese muro se iba derribando.
Aprendería la mejor manera de ir cayendolo a trocitos si hacía falta. Aprendería la mejor manera de esperar a que ese muro se fuese rompiendo. Aprendería a amarlo, a amar las cosas que me fuese dando mientras tanto. Lloraría, me agobiaría, sentiría la soledad mas cerca que nunca, caería una y otra vez... Pero eso formaría parte de ese camino y esas huellas. De ese amor a la espera. De esa esperanza e ilusión que me harían levantar cabeza cada mañana con ganas. Que me haría mirar a una lado, a otro y ver mucha claridad. 

Levante la cabeza pretendiendo mirar hacia adelante como cada día y, pensé que, la paciencia es una virtud y un don que hay que saber trabajar, que hay que aprender a formar en uno mismo, saber cuidarla y llevarla siempre que el muro se levante.







domingo, 23 de febrero de 2014

Mirando hacia adelante


Buenas noches al hoy, al ayer, al pasado. Adiós momentos, me habéis dado mucho y quitado también. Eso está bien porque me gusta el ``ahora´´.
En mi cara hay viseras, arriba y a los lados. Que sigan ahí es perfecto. Que hacen mirar hacia adelante y no tapan donde pisas. Que te oprimen mirar atrás.
Que cada paso vuelva a doler, vuelva a hacer sentir bien, vuelva a desmotivar y a motivar, a hacerme llorar tal vez o a sonreír, que cada paso vuelva a hacerme más fuerte.
Y que la meta siga ahí, que se esconda y que vuelva a salir. Que nunca deje de haber una. Que voy a encontrarla.

Cambios



Hablar de la vida, de las personas, de la sociedad de todo es muy complicado cuando entras en estado de pasotismo crónico. Los cambios no afectan como antes. Me atrevería a decir que no afectan nada. A veces siento ser una insensible, cosa que antes no me definía. Los cambios... simplemente se aceptan e intenta hacer de ellos lo mejor.

De paso


Aquí estoy, visitando mi blog nuevamente después de más de un año cuando solo recurría a el en días, semanas o incluso meses de malas rachas. Me preocupa volver a visitarle, me hace sentir confusa; más aún.
Hecho de menos tantas cosas... Como todos supongo.
Mi cuerpo y mente me piden tranquilidad, ninguna preocupación, pasar de las cosas, de todas o de la gran mayoría que no sirven de nada.
Ahora me pregunto ¿dónde he dejado esas ganas locas por hacer cosas? ¿dónde he dejado esas ilusiones y predisposición? ¿dónde está esa persona que creí conocer? ¿dónde?....
Quiero volver a ser esa persona que podía con todo, que estaba ahí dispuesta a todo, que estaba ahí para todo, que conseguía todo lo que se proponía o al menos se quedaba en la puerta de conseguirlo, bien cerquita... ¿Qué ha cambiado? Me gustaría saberlo.
Me torturo si paso mas de un día sin hacer nada de provecho.... ¿por qué?
No me apetece escuchar nada ni a nadie, es más no quiero ayuda ni opiniones. Siento la necesidad de escucharme a mi misma, de sentirme la persona de siempre, de reflexionar.... 
En realidad ni si quiera se lo que necesito o quiero.